20 de febrero de 2008

Hoy es cosa de mujeres

Asistiré esta tarde con Javier a un acto que los socialistas coruñeses organizamos en todas las campañas; un acto en el que ponemos en valor los avances que se han producido en materia de igualdad y reivindicamos lo que queda por hacer.

Siempre me hago la misma reflexión cuando preparo un acto de estas características y es que siempre comienzo pensando en la historia de las mujeres. Y es que nada tiene que ver mi generación, la de mi madre o la de mi abuela con la generación actual, la generación de las chicas jóvenes que ya han conocido otra etapa; una etapa de igual acceso a la educación, de derechos iguales, de independencia económica... Reconozco que desde esta perspectiva me motiva especialmente vivir en esta época y poder asistir a actos que como el de hoy, reunen a mujeres de muy distintas generaciones.

Y en esta ocasión, acudo con la sensación de que sin pasarme, sé que voy a poder presumir, presumir de ser diputada de un partido que sustenta a un gobierno que ha aprobado la Ley para la Igualdad efectiva de mujeres y hombres, más conocida como Ley de Igualdad. Pero pongo el nombre completo porque creo que refleja claramente el sentir de quienes la han propiciado, de las socialistas y de los socialistas. Una iniciativa estratégica del gobierno de Zapatero que además era un compromiso electoral y ahora ya es una realidad. Una ley que tiene por objetivos hacer real y efectivo el principio de igualdad y eliminar cualquier tipo de discriminación por razón de sexo. Y sobre todo, una ley que supone un cambio social de primer orden: la igualdad de oportunidades para las mujeres es un derecho legal.

Pero además de la Ley de Igualdad, hay otra serie de iniciativas en las que he participado como Presidenta de la Comisión de Trabajo y Asuntos Sociales del Congreso de los Diputados y que de uno u otro modo, contribuyen a reforzar ese equilibrio, esa conciliación entra la vida familiar, la profesional y la personal. Es el caso de la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y atención a las personas en situación de dependencia, que conocemos como Ley de Dependencia. Pero hay más, las ayudas de 2.500 euros por cada nuevo hijo, que siempre ayudan, el nuevo permiso de paternidad, la mejora del permiso de maternidad en caso de parto múltiple, un plan de infancia y adolescencia o los incentivos a la contratación indefinida de mujeres reincorporadas tras cinco años de inactividad.

Y podría seguir... Pero lo mejor, es que nuestro programa electoral no pierde la intensidad. A todas las mujeres que me acompañen hoy en el acto les diré que lo hecho es un orgullo, pero es también un orgullo lo que proponemos en nuestro programa para la próxima legislatura.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Durante muchos años hemos luchado por las políticas de igualdad y siempre he pensado que las mujeres tenemos que involucrarnos en los problemas de la comunidad y no resguardarnos en el gueto al que, muchas veces, los políticos pretenden condenarnos haciéndonos creer que nuestros problemas, los "femeninos", son siempre específicos. Por eso aprovecho para solidarizarme con muchos de los comentarios que he visto aquí pidiendo compromisos claros con el aeropuerto. Es nuestra principal infraestructura. Ni AVE, ni trenes rápidos, ni farrapos de gaitas, si se me permite la expresión. Claro que yo también exijo ampliación de la pista, ¡por favor, es un tema sangrante! Pero además exijo que nuestro presidente se comprometa a poner plazo al enlace de la AP-9 con el aeropuerto, que parece haber caído en el olvido. Yo creo que estos compromisos son, ahora más que nunca, cosa de mujeres. Qué pena que la ministra Álvarez, mujer al fin, pero muy poco solidaria, haya dejado perder esta legislatura. Y yo no estoy dispuesta a perder otra más. Y pienso ir con pancartas al mitin de Zapatero igual que hicieron los funcionarios de justicia exigiendo ampliación de Alvedro. Saludos.

Anónimo dijo...

¿Pero aínda credes que escribindo nun destes blogs vades conseguir algo? Ollade para os traballadores da Xustiza, moita igualdade pero unha muller do corpo de xustiza cobra 400 euros menos ao mes no territorio do ministro Bermejo que un home de, por exemplo, a comunidade de Madrid. E isto cun ministro que se autoproclama socialista ao tempo que reforma o pisiño cos cartos públicos. Pois o mesmo é o de Alvedro. Zapatero non fai nada coa pista nin cos accesos, nin coa famosa cabeceira do sur e aquí a secretaria de prensa de Marón escribe unhas palabriñas tranquilizadoras como se fosen para rapaces e preparar o terreo para que cando chegue Zapatero non lle botemos a perder o mitin. Pois xa nos pode ir botando fóra aos traballadores da xustiza e aos alvedristas e a moitos máis que o votamos enganados no 2004. Imos durar máis tempo en activo nós ca el.